En Inglorius Basterds todo en la superficie es en su esencia lo contrario:
-Los diálogos, divertidísimos en sí mismos, adquieren su sentido dramático en la inherencia con sus imágenes y viceversa.
-Sus largas y diluidas secuencias encuentran su ritmo trepidante en sus demoledores subtextos.
-Y sus personajes, planos, emergen en una historia con un sinfín de niveles de profundidad.
Anomia
No hay comentarios:
Publicar un comentario