domingo, 23 de noviembre de 2008

EL GRECO

El bien que viene por el mal de sus innumerables torpezas es que queda oculto tras ellas el error fundamental de la película: la ausencia de arco narrativo.
Despistados, podemos divertirnos machacando al director mientras el guionista se va de rositas, sí, dando saltitos a cámaralentapelitoalviento.
Anomia

2 comentarios:

Porterodelantero dijo...

Una reflexión al margen de la crítica cinematográfica:

Sea una obra maestra o sea un bodrio, una película siempre implica a muchas personas. Exige la entrega de gran parte o de todo su tiempo y energía durante un período más o menos largo de su vida: días, semanas, meses... incluso años. Yo tuve que trabajar durante días en una parte del material promocional de esta película y tuve que hacer algo que, si bien no era nada extraordinario en sí mismo, me supuso un gran esfuerzo por mi entonces muy limitada experiencia en el tema.

Cuando una de estas personas que, como yo, han recibido órdenes de hacer su trabajo esforzándose al máximo, dándolo todo por que la idea de ese director/productor/guionista se haga material y ha trabajado ofreciendo su talento e ilusión (no solo a cambio de dinero) se enfrenta a una situación como la que, me imagino, vivieron muchos en el estreno del otro día... ¿qué ocurre, entonces?

A menudo pienso esto cuando tengo que trabajar en proyectos ajenos en los que alguien me exige que lo de todo: veo el resultado y pienso ¿Para esto me he esforzado? ¿Para que lo que yo he hecho con mi esfuerzo e ilusión sea una pequeña parte de un TODO lamentable que, irremediablemente, eclipsa con su mediocridad cualquier PARTE que pueda tener algo bueno? No puedo evitar rememorar los momentos en que la persona a la que sí pertenece la obra me daba instrucciones y me pedía lo mejor de mi y siento retrospectivamente algo parecido al desprecio.

Entonces es cuando pienso que, al menos, he ganado dinero.

Anónimo dijo...

Sí, me parece una reflexión pertinente. En tareas en las que el resultado final depende de un trabajo hiperfragmentado, o participas del control creativo, o supongo que no te queda otra que asumir el papel de mercenario